4 razones para desconectar de la tecnología

4 razones para desconectar de la tecnología

Te propongo que eches la vista atrás e intentes recordar tu vida sin tecnología ¿eres capaz?. La tenemos tan integrada en nuestra vida cotidiana que si desapareciera de un día para otro, no sabríamos que hacer y nos costaría mucho amoldarnos a vivir sin ella. Sin embargo, hace relativamente poco tiempo que se integró con nosotros. ¿Sabías que el primer smartphone nació en el año 2000 y Whatsapp no llegó a nuestros móviles hasta 2009?. Recuerdo que fue una verdadera revolución.

Aunque nos ayuda mucho y se han logrado grandes beneficios en todos los campos gracias al avance tecnológico, también tiene inconvenientes. Nos hemos sumergido tanto en ella que hemos creado dos realidades; dentro y fuera de las pantallas. Sobresaturar nuestra mente tiene efectos perjudiciales para la salud física y mental. Por ello, el detox digital es una tendencia creciente a nivel mundial. 

Queremos darte algunas razones para desconectar de la tecnología. No significa que no la uses nunca más ¡ya forma parte de nosotros!, pero si es importante aprender a hacer un uso responsable de ella.

¿Por qué deberías desconectar un poco de la tecnología?

Adicción. Sin duda, la tecnología es adictiva. Ya existen estudios y casos de psicólogos que tratan la adicción, sobre todo al móvil. Las razones pueden ser muchas y cada persona lo vive de una manera diferente. Somos seres sociales y necesitamos estar en contacto con los demás. Por eso, la posibilidad permanente de comunicación nos resulta satisfactorio y nos lleva a estar pendientes del móvil. Por otro lado, los elementos estéticos de la tecnología también atraen a la mente. Las notificaciones flotantes, las actualizaciones de las aplicaciones, las mejoras en el diseño de imágenes, etc, atraen nuestra atención.

Habitualmente, no nos damos cuenta de que somos adictos a la tecnología, ya que es un comportamiento social generalizado y la adicción se va construyendo de forma sutil. Existen aplicaciones como Offtime o Bienestar Digital para controlar el uso excesivo del móvil.

Distracción y falta de concentración. Los dispositivos electrónicos son “ladrones de tiempo”. ¿Conoces el concepto? Son factores que nos hacen perder el tiempo e impiden una buena organización y planificación de nuestros objetivos. Entre ellos se encuentra la tecnología. En las aplicaciones que hemos mencionado en el punto anterior, podrás comprobar también cuántos minutos ¡e incluso horas! has estado usando el teléfono. Seguro que te sorprenderás. En consecuencia, podemos caer en el incumplimiento de obligaciones diarias en el trabajo, en los estudios, e incluso con nuestra familia y amigos. Con el tiempo, pasar largos ratos delante de una pantalla afecta a nuestra capacidad de concentración.

Pero, ¿sabes cuál es la principal aliada de las distracciones? Esa notificación que llega mientras estas realizando otra tarea. Si escuchamos el móvil vibrar o sonar, caemos en la tentación de mirarlo. Por eso, es recomendable que cuando estés haciendo algo que precise de tu atención y concentración, dejes a un lado el móvil. Más tarde, tendrás tiempo de comprobar esas notificaciones que no son prioritarias.

Sedentarismo. La tecnología nos hace sedentarios. El tiempo que inviertes en ella mantienes inactivo tu cuerpo. Mantener una vida activa es fundamental para gozar de buena salud. Antes, para socializar necesitábamos salir a la calle para encontrarnos con familia y amigos. Ahora ese proceso de socialización muchas veces es sustituido por el uso de redes sociales y aplicaciones de mensajería. ¿Sabías que según la Organización Mundial de la Salud alrededor del 60% de personas son sedentarias? Una importante cifra de ese porcentaje esta formada por jóvenes.

Hay muchas maneras de vencer la inactividad física. Dar un largo paseo, hacer running, montar en bicicleta,etc. Ahora que estamos más tiempo en casa, podemos también hacer uso de la tecnología para movernos. Puedes hacer ejercicio, por ejemplo, con vídeos de YouTube o recurrir a videojuegos que implican movimiento, como te contamos en esta entrada. Sea como sea ¡muévete!

Pérdida de la realidad.  No podemos olvidar que la verdadera realidad existe fuera de nuestros dispositivos electrónicos. Como ya habrás oído muchas veces, la imagen que damos en redes sociales suele corresponder a una falsa realidad. También, los videojuegos cada vez presentan mejores gráficos y  parece que estamos dentro de él. La realidad virtual aumenta más esa sensación si cabe, ya que el cerebro realmente percibe que estamos sumergidos en esa situación.

De forma natural, nuestra mente busca el entretenimiento y la comodidad, por lo que si le mostramos algo que nos gusta se acomodará. Este caso en muy habitual en los gamers, algunos de los cuales han convertido esta afición en su trabajo. Mantener la atención plena y consciente en el presente te ayudará, como se suele decir, a que tu mente no active el “piloto automático”.

Desconecta para conectar.

Patricia. Redactora. Voluntaria en Inspiranza. 

 

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